¿Por dónde se escapa tu dinero cuando calientas o refrigeras tu casa?
¿Quizás ventilas demasiado? Con el test de estanqueidad o BlowerDoor podremos detectarlo.
El Test BlowerDoor evalúa la hermeticidad de una vivienda, es decir, la estanqueidad del aire dentro de la misma.
En Casas Arquicenter hemos creado viviendas con un alto grado de hermeticidad basado en un desarrollo constructivo con hormigón y una envolvente con un gran aislamiento térmico, ventanas de calidad y diseños sin puentes térmicos, obteniendo viviendas ECCN (Edificios de Consumo de Energía Casi Nulo).
El BlowerDoor es la prueba más avanzada para realizar un control sobre la eficiencia de nuestra vivienda y determinar los siguientes puntos:
- Evitar problemas de condensación de humedad.
- Evitar que existan espacios o rincones de la casa que sean excepcionalmente incomodos porque haya alguna entrada de aire frio no deseada.
- Determinar cuánta ventilación mecánica podría ser necesaria para proporcionar una calidad de aire interior adecuado y saludable,sin que resulte excesiva.
- Reducir el consumo de energía debido a fugas de aire no controladas por falta de estanqueidad en las soluciones constructivas utilizadas.
Test BlowerDoor
El procedimiento del test blowerdoor consiste en:
Una puerta de ventilador, que no es más que un ventilador potente que se monta en el marco de una puerta exterior. El ventilador extrae el aire de la casa, lo que reduce la presión del aire en el interior. La mayor presión de aire exterior fluye a través de todas las grietas y aberturas no selladas. Los técnicos usamos una máquina de humo para detectar fugas de aire.Estas pruebas determinan la tasa de infiltración de aire de un edificio.
La BloowerDoor o puerta ventilador consiste en un marco y panel flexible que se adapta al hueco de la puerta de entrada, un ventilador de velocidad variable, un manómetro para medir las diferencias de presión dentro y fuera del hogar, y un manómetro para medir el flujo de aire.
Hay dos tipos de puertas ventilador: calibradas y sin calibrar. Preferimos las calibradas, ya que además de permitirnos localizar posibles fugas también nos proporcionan datos precisos con los que calibraremos los equipos de ventilación mecánica.