¿Qué es el gas radón y qué peligros tiene?
Desde el punto de vista químico, el radón es un gas noble con número atómico 86 descubierto en 1900. Ahora que sabes qué es el gas radón, vamos a ver por qué es peligroso. La mayoría del radón se produce por desintegración radiactiva de otros elementos. El radón es un gas radiactivo que emana del principal problema cuando se inhala: los radiactivos se adhieren al tejido pulmonar, provocando cáncer en una exposición prolongada. En las Casas Pasivas de Casas Arquicenter la ventilación mecánica con intercambiador de calor la exposición al radón se reduce al mínimo. Incluso en las zonas más bajas de la vivienda.
Hay zonas geográficas donde, por motivos geológicos, es más probable encontrar edificios con altos niveles de radón. El Consejo de Seguridad Nuclear clasifica todo el territorio e identifica las zonas en donde los edificios tienen concentraciones superiores a 300 Bq/m3 y se observa que % superan este nivel.
En exteriores, el radón se diluye rápidamente a niveles bajos y generalmente no es peligroso, pero es más alto en interiores, especialmente en áreas poco ventiladas.
Medidas preventivas
Sistemas de barrera
Para evitar que el radón se infiltre desde el sótano. En el proceso de construcción se puede instalar una «barrera». Que está formada por una capa de hormigón. Además de instalar un agregado con un espesor mínimo de 10 cm en un sustrato de suelo. Allí se coloca una membrana geotextil , seguida de una membrana de polietileno de al menos 0,4 mm.
Medidas mitigadoras: Evacuación del gas radón
Ahora que sabes qué es el gas radón, hay varias formas de evacuar el gas para prevenir sus efectos nocivos.
Ventilación natural
Con una ventilación muy importante, los ambientes interiores son prácticamente indistinguibles de los exteriores. Esto significa que una ventilación más alta de lo normal disminuirá la concentración de radón en el interior. La ventilación natural se produce en el recinto por el paso de aire a través de las aberturas. Y por la acción del viento debido a la diferencia de temperatura y presión entre el interior y el exterior.
Es sin duda parece el método más económico. Pero su rendimiento varía en función de las condiciones climáticas. Por ejemplo, en los meses fríos la ventilación natural provoca un gasto extra en calefacción. Y en los meses de verano también eleva el gasto en aire acondicionado. Así que a fin de cuentas solo es más económico si se produce en los días templados de otoño y primavera.
Ventilación mecánica
También es posible instalar un sistema de extracción bajo el suelo donde el aire cargado con radón es evacuado del edificio.
Cualquier escape de aire cargado de radón debe estar a una distancia grande del edificio o nivel para evitar que el radón ingrese al edificio.
Puedes consultar el catálogo Passivhaus para elegir la vivienda pasiva que más te guste. Casas Arquicenter se ocupa del resto.